La Pampa: Salud dio precisiones respecto al uso en pacientes del ibuprofeno inhalatorio
Jueves 12 de Noviembre de 2020 - 18:28:22
La pandemia por COVID-19 impactó a la humanidad y en este contexto, hasta la fecha, no existen tratamientos específicos. La provincia de La Pampa, por decisión del gobernador Sergio Ziliotto, comenzó a utilizar el ibuprofeno inhalatorio como una de las herramientas terapéuticas bajo la modalidad de medicamento de “uso compasivo”.
En este sentido, todos los tratamientos ofrecidos a los pacientes, con alguna excepción, son sintomáticos. Tomando en consideración esto último, el Ministerio de Salud siguió con sumo interés las diferentes estrategias terapéuticas ofrecidas, aunque no han sido aprobadas con la rigurosidad científica que se le exige a cualquier producto farmacéutico en el mundo, y una que llamó la atención fue el ibuprofeno inhalatorio. El ibuprofeno es un medicamento que se viene utilizando desde hace muchísimos años en dosis muy superiores a las que se usarían por la vía inhalatoria, por lo cual la concentración de ibuprofeno en sangre por esta vía, es tan baja que solo puede actuar por efecto local.
Otro aspecto a tener en cuenta, en diálogo con investigadores del ibuprofeno, es que queda entendido que no es para todos los pacientes que porten el virus o la enfermedad. Habría un subgrupo de pacientes que tendrían un beneficio utilizando el ibuprofeno inhalatorio. Según investigaciones, este tratamiento disminuiría los días de internación y en algunos pacientes el progreso de la enfermedad a estadíos más severos. Su uso es por indicación médica "no a pedido" y bajo la forma de concentimiento informado, por el paciente o por un familiar.
El 6 de noviembre de 2020, Salud provincial decidió elaborar una Resolución ministerial a través de la cual se pone en práctica en La Pampa el uso del ibuprofeno bajo la modalidad de medicamento de “uso compasivo”, que significa que el paciente tiene la oportunidad de recibirlo o rechazarlo, a través de un consentimiento informado. Esto se debe dar con el paciente o con un familiar y con la participación de los Comités de Bioética de los hospitales que lo lleven adelante.
Sería una herramienta más en la lucha contra esta enfermedad hasta contar con la posibilidad de vacunar a la comunidad. Esto sería entendido como un proceso muy largo, uno de los programas de vacunación más importante que haría la Argentina, lo que representaría una logística importante.
En el contexto de todo el proceso vacunatorio cuando suceda, nunca habrá que abandonar las medidas de cuidados personales, ya que para lograr una barrera biológica de este virus a través de la vacunación, se necesita vacunar por lo menos al 80% de la población. En una primera etapa se vacunará a 12 millones de argentinos.