General Pico: más de 40 mascotas pasaron por el quirófano móvil en su primera jornada en Barrio El Molino
Miércoles 30 de Mayo de 2018 - 08:42:47
En el marco de llevarse a cabo la campaña gratuita de castración de perros y gatos, personal veterinario de la Municipalidad de General Pico, de Sector Canino y de la Facultad de Ciencias Veterinarias realizó la castración de 44 mascotas durante la primera jornada efectuada durante el día martes en el barrio Molino. La actividad preventiva comenzó hace dos semanas atrás cuando el nombrado personal visitó casa por casa a los vecinos de barrio, vacunando a las mascotas, esterilizándolas y también anotando turnos de castraciones. El quirófano móvil se encuentra ubicado en el Servicio Social de Base de calle 25 entre 102 y 104, de 9 a 16 horas, tiempo en el que ya se efectuaron 44 castraciones, un número sumamente positivo para reducir el aumento de la población indiscriminada de perros y gatos en ese barrio. “El quirófano se instaló el día martes a las 9 horas, en el Servicio Social de Base del barrio donde los veterinarios comenzaron con las castraciones. Se acercaron muchos vecinos gracias a Dios, era lo que esperábamos, que la gente pueda responder a este tipo de iniciativas”. El quirófano está dentro de un predio que no corre riesgo si llueve pero creemos que por ahí se le puede complicar al vecino para llegar. A su vez, Melina Medus habló de la actitud de los vecinos tras la visita de los veterinarios. Es excelente la respuesta del vecino de este barrio.
La directora de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Secretaría de Ambiente y Servicios Públicos del municipio local, Melina Medus, explicó en diálogo con los medios que “primero empezamos con la campaña puerta a puerta, donde se realizó una especie de encuesta al vecino sobre si tiene o no mascota y el estado sanitario de las mismas. Ahí también los profesionales efectuaron la vacunación antirrábica y además se les toma el turno en el caso que sea necesario castrar alguna de las mascotas”, estableció.
Estuve charlando con uno de los veterinarios que realizó la jornada desde el principio y me manifestó que se vio sorprendido por la buena respuesta pese a que el puerta a puerta se hizo de 13 a 17 horas, un horario donde la gente quizás descansa”, afirmó. “Por motivos laborales de la sociedad lo hicimos en ese horario que sabemos que están en la casa, pero la verdad me manifestaron que fueron atendidos siempre con la mejor intención, muy bien recibidos”.