Tribunales Santarroseños: condenaron a un policía por amenazas y peculado
Martes 13 de Marzo de 2018 - 20:10:05
La jueza de control de Santa Rosa, María Florencia Maza, condenó a José Carlos Reinhard a dos años y dos meses de prisión en suspenso, e inhabilitación absoluta perpetua, por resultar autor material y penalmente responsable de los delitos de amenazas simples en concurso real con peculado, por hechos ocurridos en perjuicio de una mujer y de la administración pública, respectivamente.
Además le fijó el cumplimiento de las siguientes reglas de conducta por el término de dos años, bajo apercibimiento –en caso de incumplimiento–, de revocarle la condicionalidad de la sanción: fijar domicilio, del que no podrá ausentarse sin autorización de la autoridad judicial, someterse al contralor de la Unidad de Abordaje, Supervisión y Orientación de personas en conflicto con la ley penal; abstenerse de entrar en contacto con su exesposa, ni acercarse a menos de 200 metros del lugar donde se encuentre, ni de su domicilio, ni de la escuela a la que concurre su hija; y realizar un tratamiento psicológico. Mayor información en ver más...
El conflicto penal se resolvió por la vía alternativa del juicio abreviado, que fue solicitado en forma conjunta por el fiscal Andrés Torino, el defensor particular Sergio Nicoletti y el propio imputado, un cabo de la policía de 32 años. Su exmujer, al serle notificado el acuerdo, también dio su consentimiento.
En uno de los legajos quedó acreditado que, de manera recurrente y hasta el día de la denuncia (26 de febrero pasado), Reinhard le manifestó a su expareja “expresiones amedrentantes, tales como ‘mi prioridad es el trabajo, me lo hacés perder y te mato, por eso te pago el alquiler’”. Esos hechos, dice el fallo, ocurrieron intramuros. “Esas manifestaciones se produjeron en una clara situación de violencia de género y fueron vertidas a los fines de amedrentar a su destinataria, limitándola en su libertad de autodeterminación”, indicó Maza.
Con relación a la otra causa, se probó que el acusado, “en oportunidad de encontrarse cumpliendo sus funciones como empleado policial, se apoderó, en diversos lugares públicos –cuya custodia le había sido confiada en su tarea de servicio adicional–, de diversos elementos, entre los que se encuentran baterías y alternadores de la playa judicial, un ventilador, luminarias, una estufa, una mesa de luz de melamina blanca con un cajón, estantes y puertas, ocho cajas con pisos cerámicos del hospital en construcción y una cortina con identificación de Bienes Patrimoniales de la Provincia”.
La sentencia indica que llevó “dichos objetos a su propio domicilio” –allí fueron incautados durante un allanamiento– y que los utilizó “para provecho propio”. Aquí la denunciante también fue su exesposa.
Finalmente, Maza ordenó que la resolución sea comunicada al Registro Nacional de Reincidencia y al Departamento Judicial de la Policía de La Pampa.