Tribunales Piquenses: nueve años de prisión para el joven que mató a un vecino suyo en el barrio Ranqueles
Jueves 8 de Octubre de 2015 - 23:20:57
Se trata de Leo Andrés Solopi, el muchacho de 21 años que el pasado 19 de abril al mediodía apuñaló en el pecho a Miguel Ángel Chávez, de 31 años, provocándole la muerte. Solopi fue condenado este jueves por el delito de "homicidio simple" y recibió una pena de nueve años de prisión efectiva. La sentencia dictada por el Juez de Audiencia, Fabricio Losi, coincide con el pedido de la fiscal Ana Laura Ruffini en los alegatos finales del debate oral y público que se realizó la semana anterior. En aquel momento, y al finalizar el mismo, cuando se le concedió la última palabra al imputado, éste dijo que está "arrepentido" y le pidió "perdón" a la familia Chávez, señalando que "no tuvo intención de quitarle la vida", y que "nunca pensó iba a pasar por este momento".
La opinión del Juez Losi
"La causa de la muerte de Chávez fue una puñalada certera en su corazón asestada intencionalmente por Leo Solopi. El motivo fue nimio. Un grupo de personas, que durante la semana son trabajadoras y pacíficas, están alcoholizadas casi al mediodía del domingo, en un punto de encuentro habitual en las esquinas de nuestra ciudad. Producto de su estado, sin el descanso necesario dado que estaban sin dormir desde el día anterior, se empeñan en reyertas entre ellos y molestias a los vecinos -a los cuales orinan sus casas y se muestran impúdicamente ante los niños del lugar-. Esta situación, que pareciera se ha tornado habitual en nuestros días, derivó en un incidente con vecinos que se sintieron molestos -aunque durante la semana mantengan una convivencia cordial- y culminó con la muerte de uno de ellos. No hay otra explicación. Sólo la ira desatada en Solopi, de quien no tenemos constancia que estuviera bajo efectos del alcohol o estupefacientes, dado que no se le suministró ninguna prueba inmediata, sino recién a las 48 horas. Existieron las molestias por parte de Chávez, quien muy alcoholizado probablemente insultó a la madre de Solopi. Las amenazas no son sustentables, dado que todos rescatan el carácter pacífico de la víctima, dato que incluso afirmó Solopi en su última palabra. Pero no existió ninguna agresión ilegítima hacia el acusado, o sus padres, que habilitara el ejercicio de la legítima defensa. Corresponde tipificar los hechos como Homicidio Simple".